Pasajes bíblicos jocosos Vol. 1

Pedro y Pablo 11:40 (pm)

En aquellos días Jesus dijo "hermanos: vayamos a orar al monte" a lo que todos agarraron la onda de que ahí en Jerusalen había "pájaros en el alambre", total que cuando iban saliendo de la ciudad les dice Jesus a todos "compañeros, tomen una piedra grande y llévenla con ustedes todo el camino hasta el monte", dicho esto, Jesus tomó una piedra del tamaño de un balón de basketball para poner el ejemplo y todos comenzaron a hacer lo mismo. En eso Judas, que era como pepito pero acá más grande pensó "ni merga que me llevo ese pinche piedrón, ni que fuera el pípila" y sobres que se agarra acá una piedrita del tamaño de una pelota de tenis.

Avanzaban todos a paso lento cargando con la piedra que seguramente tenía un fin en la enseñanza, mientras tanto Judas se reía por momentos de los demás y en ocasiones mandaba mensajitos por su celular. Llegaron al monte y comenzaron las oraciones. Llegada la hora de comer, alguien preguntó a Jesus: "maestro ¿qué es lo que vamos a comer hoy?" a lo que Jesús contestó para todos: "muestrenme todos las piedras que han traido cargando". Cuando todos hubieron sacado sus piedras, Jesus, con un movimiento de manos tipo "abuken" de Street Fighter realizó el milagro y convirtió todas las piedras en pan. Sobra decir que mientras todos comían hasta saciarse, Judas había terminado su panecito y se le hacía agua la boca viendo a los demás comer; y para colmo, el saldo de su amigo se había agotado.

Regresaron a la ciudad y Judas llegó de puro milagro, casi desmayándose falto de energía. Días después Jesus convocó nuevamente a todos los apóstoles para acudir a orar al monte. Al salir de la ciudad realizó nuevamente la petición para que todos tomaran una piedra y la cargaran hasta el monte. En esta ocasión Judas pensó "ora si no me hacen pendejo" y sobres que se agarra, no una piedra del tamaño de un balón de basket, sino una pinche roca hija de la chingada que se robó de la construcción de un monumento a los niños héroes. Y pues ya iban todos acá cargando sus piedras normales y el pinche Judas en chinga pujando para cargar el piedrón loco que había agarrado. Finalmente luego de mucho esfuerzo llegó agotado al monte a alcanzar a los demás.

Al comenzar a descender el sol, Judas comenzó impaciente a preguntar a Jesus a qué hora iban a comer. Jesus se volteo hacia sus discípulos y les dijo "todos saquen sus piedras y colóquenlas frente a ustedes...", Judas, emocionado, con una gran sonrisa hizo el último gran esfuerzo para cargar su piedra frente a él. Cuando todos hubieron colocado las piedras Jesus alzó los brazos al frente y con un movimiento de muñecas agitó las manos verticalmente con las palmas hacia abajo mientras decía: "ok, ahora todos siéntense en sus piedras porque... ¡hoy traje tortas!" jajaja